ANALÍTICA DE PROCESOS
Supervisión de los procesos de elaboración de cerveza
Supervisión de los procesos de elaboración de cerveza
El sabor y la calidad de la cerveza dependen en gran medida de la calidad del agua. Su calidad está determinada por mediciones de pH y conductividad.
En vista de la globalización, las cervecerías están sometidas a una gran presión competitiva. La garantía de la calidad constante de la cerveza es esencial para el éxito en el mercado.
El uso de la tecnología de medición analítica permite garantizar la calidad al tiempo que optimiza el control del proceso.
Conversión de almidón-azúcar en el proceso de maceración estrictamente dependiente del pH
La medición de pH también juega un papel importante en los procesos posteriores: después de mezclar el agua de elaboración en el caldero con malta de cerveza triturada, las enzimas convierten el almidón contenido en azúcar de malta. Este proceso depende estrictamente del pH y tiene lugar en el rango de pH entre 5,4 y 5,6. En la siguiente cocción del mosto, el sabor y la durabilidad de la futura cerveza se controlan añadiendo lúpulo, se determina el contenido de mosto original y se reduce el valor de pH. Debido a la posibilidad de esterilización con vapor caliente y a la biocompatibilidad, el sensor de pH SE555 está predestinado para controlar estos procesos.
Medición de oxígeno: esencial para una guía segura del proceso
Después, el trub (componentes de lúpulo no disueltos y proteína precipitada) se separa en el remolino y se agregan levadura y oxígeno al mosto para iniciar la fermentación alcohólica real. Para la levadura se aplican las regulaciones más estrictas. Con el fin de garantizar una calidad óptima, el cultivo de levaduras se lleva a cabo bajo la supervisión del valor de pH y del contenido de oxígeno disuelto. Dado que este último determina la vitalidad de la levadura durante la fermentación y la formación de sabor, la medición de oxígeno es esencial para una guía segura del proceso. En este punto, el sensor de oxígeno SE706 en el diseño higiénico de acero inoxidable garantiza una medición en línea fiable.
Cuando la cocción madura en tanques de almacenamiento para convertirse en cerveza joven, un bajo contenido de oxígeno garantiza que se conserve el sabor. Además, la medición continua de oxígeno se utiliza para detectar fugas a tiempo en los tanques de almacenamiento. Antes de proceder con el embotellado, la cerveza se filtra y se almacena en tanques a presión. Para garantizar el sabor y evitar la oxidación, también se deben observar los valores límite para la concentración máxima de oxígeno. Algunas cervecerías de gran magnitud ajustan el contenido exacto de alcohol de la cerveza diluyéndola con agua desgasificada. La desgasificación se controla midiendo el oxígeno disuelto. Lo mismo se aplica al embotellado, en el que la concentración de oxígeno debe permanecer generalmente por debajo de 25 ppb por razones de durabilidad y sabor.
CIP: dosificación de medios de limpieza con medición inductiva de la conductividad
Para cumplir con las estrictas prescripciones de higiene en la producción de alimentos, las instalaciones se limpian en el proceso CIP, en el que la solución de sosa cáustica y ácido (generalmente ácido nítrico) se lavan alternativamente a través del sistema a temperaturas alrededor de 65 °C. La concentración de los medios CIP (afilado) se controla sobre la base de mediciones inductivas de la conductividad con el sensor SE680. En el Final Rinse, el lavado final de las tuberías de proceso limpias, se verifica la eliminación completa de cualquier medio de limpieza con el sensor de conductividadconductivo SE605 H.
Tratamiento de las aguas residuales en cervecerías
La tecnología Memosens también se utiliza en el tratamiento de las aguas residuales en cervecerías, como el sensor de pH SE554, el sensor de alta resistencia química SE655 para medir la conductividad inductiva en medios muy contaminados o el sensor de oxígeno con estabilidad a largo plazo SE715. Como es de esperar que el tratamiento de las aguas residuales en cervecerías produzca un aumento de la carga de contaminación, se recomienda utilizar sistemas de limpieza automatizados para los puntos de medición afectados.
Return on Investment
- El sistema enchufable inductivo sin contacto de los sensores Memosens garantiza una fiabilidad y calidad inigualables de las mediciones en el entorno húmedo de la fábrica de cerveza y en la limpieza de la instalación.
- Las mediciones fiables y precisas forman la base fundamental para un producto de alta calidad y garantizan que las características de la marca sean decisivas desde el punto de vista del consumidor.
- Reducción de costes gracias al aumento de la vida útil del sensor: Memosens detecta el número de ciclos CIP/SIP y recomienda intervalos de mantenimiento para aumentar la vida útil de los sensores.
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